Navegación por categorías

Navegación por categorías

Atrás

Atrás

Mapas de ruido y Planes de acción

Mapas de ruido.

Generalidades. Marco Regulatorio .-

 

La Directiva 2002/49/CE del Parlamento Europeo y del consejo sobre evaluación y gestión del ruido ambiental definió los mapas estratégicos de ruido como “mapas diseñados para poder evaluar globalmente la exposición al ruido en una zona determinada, debido a la existencia de distintas fuentes de ruido, o para poder realizar predicciones globales para dicha zona”; en consecuencia, estos mapas son un instrumento diseñado para evaluar la exposición al ruido. Los mapas estratégicos de ruido contienen información sobre niveles sonoros y sobre la población expuesta a determinados intervalos de esos niveles de ruido, además de otros datos exigidos por la Directiva 2002/49/CE.

 

El desarrollo reglamentario de la Ley 37/2003, de 17 de noviembre, del ruido, a través del Real Decreto 1513/2005, de 16 de diciembre, por el que se desarrolla la Ley 37/2003, de 17 de noviembre, del ruido, en lo referente a la evaluación y gestión del ruido ambiental y del Real Decreto 1367/2007, por el que se desarrolla la Ley 37/2003 del Ruido, en lo referente a zonificación acústica, objetivos de calidad y emisiones acústicas, configuran el marco normativo general para el desarrollo de los instrumentos fundamentales de gestión de la contaminación acústica: los mapas de ruido y los planes de acción.

 

Dado el carácter local del ruido, su gestión tiene un claro componente zonal, por lo que los mapas de ruido contemplan una zonificación según áreas acústicas establecidas, que se definen por el uso predominante del suelo, y unos objetivos de calidad acústica para cada una de ellas, lo que tiene una clara incidencia en el planeamiento urbanístico y la ordenación del territorio.

 

Los objetivos de estos mapas de ruidos son:

 

·         Permitir la evaluación global de la exposición a la contaminación acústica en una determinada zona

·         Permitir la realización de predicciones globales para dicha zona

·         Facilitar la ejecución de planes de acción y medidas correctoras para reducir la contaminación acústica y cumplir con los objetivos marcados

 

Para ello, los mapas de ruido de cada área acústica disponen de la siguiente información:

 

·         Valor de los índices acústicos existentes o previstos en el área

·         Valores límite aplicables (inmisión) y objetivos de calidad acústica del área

·         Evaluación del cumplimiento según los valores existentes frente a los valores límite aplicables y frente a los objetivos previstos

·         Número estimado de personas, de viviendas, de colegios y de hospitales expuestos

 

Los mapas estratégicos de ruido son, por tanto, instrumentos confeccionados para evaluar globalmente la exposición al ruido en una zona determinada y constan de:

 

  • Mapas de niveles sonoros (Lden, Lnoche, Ldía y Ltarde), representación gráfica de las curvas isófonas y el coloreado de las áreas ocupadas por rangos acústicos a partir de 55-60 dBA hasta los superiores a 75 dBA en los mapas diurnos y a partir de 50 dBA en los mapas nocturnos.
  • Mapas de exposición: muestran los valores de exposición en fachadas de viviendas y el número de personas afectadas.
  • Mapas de zonas de afección: se representa el área afectada por niveles acústicos superiores a 55 dBA y las isófonas de 55, 65 y 75 dBA. Además para cada rango acústico se calcula la superficie afectada, el número de personas y el de colegios y hospitales.

 

Además, dada la zonificación realizada y la definición de objetivos de calidad acústica zonales, surge la necesidad de definir zonas de servidumbre acústica, como espacios delimitados en los mapas de ruido, principalmente en los sectores asociados a sistemas generales de infraestructuras o equipamientos públicos de interés.

 

La normativa establece la obligatoriedad de realizar mapas de ruido en los ejes viarios y ferroviarios, aeropuertos y aglomeraciones urbanas que superen ciertos índices de población. Los mapas de ruido habrán de revisarse y, en su caso, modificarse cada cinco años a partir de la fecha de su aprobación.

 

El Real Decreto 1513/2005, de 16 de diciembre, por el que se desarrolla la Ley 37/2003, de 17 de noviembre, del ruido, en lo referente a la evaluación y gestión del ruido ambiental, establecía en su disposición adicional la creación del Sistema Básico de Información sobre la Contaminación Acústica (SICA), dependiente del Ministerio de Medio Ambiente.

 

El  SICA constituye la base de datos necesaria para la organización de la información relativa a la contaminación acústica, y a través de su página web puede consultarse la información referente a los mapas estratégicos de ruido y planes de acción que se están desarrollando por parte de las distintas administraciones competentes.


MAPAS DE RUIDO EN ASTURIAS

 

El calendario de aplicación de la Directiva de ruido insta a las Administraciones competentes a elaborar y aprobar los mapas estratégicos de ruido correspondientes a cada uno de los grandes ejes viarios, de los grandes ejes ferroviarios, de los grandes aeropuertos y de las aglomeraciones, siguiendo dos fases: la primera, que finalizó el 30 de junio de 2007, comprendió la elaboración y, en su caso, aprobación de los mapas estratégicos de ruido correspondientes a aglomeraciones con más de 250.000 habitantes y a los grandes ejes viarios cuyo tráfico (IMD) superase los seis millones de vehículos al año, así como grandes ejes ferroviarios cuyo tráfico superase los 60.000 trenes al año, y los aeropuertos con más de 50.000 operaciones al año en su territorio. La segunda fase, completada en 2012 y que debe repetirse cada cinco años, consiste en elaborar y, en su caso, aprobar por las autoridades competentes, mapas estratégicos de ruido sobre la situación al año civil anterior, correspondientes a todas las aglomeraciones urbanas y a todos los grandes ejes viarios y grandes ejes ferroviarios existentes en su territorio.

 

En 2008 se presentó el mapa estratégico de ruido de la ciudad de Gijón, una de las 17 aglomeraciones urbanas de España que debían elaborar su mapa estratégico en la primera fase de aplicación de la Directiva. Una de sus principales conclusiones fue que aunque más de la mitad de los habitantes del municipio disfrutan durante la noche de niveles sonoros inferiores a 50 dBA, un 25% de la población gijonesa está sometida a niveles sonoros superiores al objetivo durante el periodo nocturno. De igual manera, el tráfico urbano era el foco de emisión de ruido con mayor contribución, seguido muy de lejos de otras fuentes como industrias y carreteras.

 

Adicionalmente, en 2008 el Ministerio de Fomento presentó también los mapas estratégicos de ruido elaborados en 2007 para las carreteras de la red del Estado en el Principado, analizando una extensión de 126 km de los 287 que en aquel momento componían la red de vías de gran capacidad del Estado en Asturias, e incluyendo entre ellas la autovía Ruta de la Plata (A-66) y un tramo de la autovía del Cantábrico (A-8). Entre las principales conclusiones destacaba el hecho de que el número de personas afectadas por niveles sonoros superiores a 55 dBA (Lden) ascendía a 76.600, de las que 14.700 estaban afectadas además por niveles superiores a 65 dBA. Los mayores niveles de contaminación acústica se detectaron en el entorno de la A-66, afectando a 36.000 habitantes.

 

Finalmente, ese mismo año ADIF ejecutó el control de la contaminación acústica de la red ferroviaria en el tramo Villabona-Lugones, con una longitud de 7,2 km y que atraviesa las localidades de Lugones, Lugo de Llanera y Villabona, con una población afectada por las emisiones sonoras de esta infraestructura de 400 personas, de las que el 75% soportaban niveles Lden entre 55 y 59 dBA y el 25% restante entre 60 y 64 dBA.

 

En 2009 se presentó el Mapa de Ruidos relativo a las carreteras de la red autonómica del Principado de Asturias, elaborando y analizando los mapas estratégicos de ruido de las ocho grandes vías de comunicación de Asturias por las que transitan más de 6 millones de vehículos al año (139 km de vías, el 3,3% de la red autonómica) y a las que están expuestas 47.500 personas (4,4% de la población). Las carreteras estudiadas fueron: AS-I, autovía minera; AS-II, autovía de la industria o antigua Gijón – Oviedo; AS-16, Soto del Barco – Pravia; AS-17, Posada - Riaño, AS-117, Riaño – Laviana; AS-19, Avilés – Gijón; AS-266, Oviedo – Lugones; y SI-3, Granda – El Castro.

 

Los municipios afectados por estas carreteras fueron Avilés, Carreño, Corvera de Asturias, Gijón, Langreo, Laviana, Llanera, Mieres, Noreña, Oviedo, Pravia, San Martín del Rey Aurelio, Siero y Soto del Barco. Entre los principales resultados se detectaron ocho “puntos negros acústicos” ubicados en la AS-I, AS-II, AS-16, AS-17, AS-19, AS-266, AS-117 y SI-3; además de los 139 km de vías evaluados, 75 kilómetros se encontraban expuestos a un nivel de ruido superior a 55 dBA, 16,5 kilómetros superior a 65 dBA y 3,5 kilómetros a 75 dBA. En términos de población, un total de 200 personas soportaban niveles de ruidos por encima de 75 dBA, 6.500 personas por encima de los 65 dBA y 47.400 por encima de 55 dBA. Asimismo, se identificaron 3 hospitales afectados por niveles de ruido superiores a 65 dBA, 11 por niveles superiores a 55 dBA, 2 colegios afectados por niveles de ruido superiores a 75 dBA, 7 donde se superaban los 65 dBA y otros 26 con niveles sonoros superiores a 55 dBA.

 

En 2010, la Consejería de Fomento, Ordenación del Territorio y Medio Ambiente del Principado de Asturias elaboró los mapas estratégicos de ruido de las carreteras con una IMD de más de 8.219 vehículos (que corresponden a 3.000.000 de vehículos anuales) y de las que no habían sido contempladas en la elaboración de los mapas estratégicos de ruido previamente aprobados en la primera fase. En consecuencia, se analizaron las vías de titularidad autonómica con una intensidad media diaria (IMD) de unos 8.200 vehículos, lo que implicó 34 km de vías estudiadas (el 0,80% de la red autonómica), englobadas en 8 ejes viarios que discurren por 9 concejos: Aller, Carreño, Corvera de Asturias, Gijón, Langreo, Llanera, Mieres, Oviedo y Siero. Los tramos de carreteras estudiadas en esta segunda fase fueron: AS-110 Candás – Tabaza (tramo: acceso AS-18 Tabaza), AS-112 Ujo – Cabañaquinta (tramo: Ujo – Moreda), AS-116 Olloniego – Riaño, AS-118 Luanco – Veriña (tramo: Glorieta del Empalme en Veriña, entre la intersección de la GI-1 y la intersección con la AS-19), AS-246 Gijón – Langreo (tramo: el Berrón – Bendición), AS-266 Oviedo – Porceyo (tramo: la Fresneda – la Campana), CV-1 Los Campos – Trasona y AS-II Oviedo – Gijón (tramo: la Ería – Porceyo).

 

Analizando las comparativas entre la población expuesta a niveles de ruido y la población afectada acorde a lo establecido en la legislación de aplicación, se concluye que la población afectada en este caso es escasa, no llegando a las 200 personas para el escenario más desfavorable (afección en niveles de Lnoche>55 dB). Para el indicador Ldía, se contabilizan en torno a cien afectados, siendo algo menos de una centena las personas afectadas por el periodo de Ltarde. Estas cifras resultaron tan bajas debido principalmente a que existen pocas edificaciones residenciales cercanas al trazado, tratándose mayoritariamente de viviendas unifamiliares y de carácter disperso. Además, es importante mencionar que el tráfico es reducido durante el periodo nocturno, lo que explica el bajo número de personas afectadas por ruido durante ese periodo (el de mayor molestia a los ciudadanos)

 

Enlace a los mapas de ruido publicados 

Información relacionada

Documentos